MANERAS DE VIVIR
Octava temporada, capítulo 164
Fecha de emisión: 4 de febrero del 2018
CARCEL DE GIJÓN / CELDA DE CARLOS Y RUBÉN / MAÑANA
Sentado en su cama, Carlos parece preocupado por algo. Justo en ese momento entra Rubén, que mira extrañado al joven.
Rubén: ¿Estás bien?
El joven fuerza una sonrisa.
Carlos: Sí, no te preocupes.
Rubén se sienta junto al joven.
Rubén: No lo parece.
Carlos guarda silencio durante unos segundos hasta que finalmente se levanta, suspirando.
Carlos: Voy a hacer algo de ejercicio.
Rubén: Carlos…
Carlos: (Interrumpiéndole) Luego nos vemos.
El joven sale de la celda, ante la preocupada mirada de su compañero.
APARTAMENTO DE IVÁN / PASILLO / MAÑANA
El timbre suena insistentemente. Iván avanza por el pasillo y, al abrir la puerta, se sorprende al encontrarse con Vero al otro lado.
Iván: ¡Vero!
Vero: Tenemos que hablar.
Iván: Pasa.
Vero: No te preocupes, voy a ser muy breve.
Iván: Pues tú dirás.
Vero coge aire antes de volver a hablar.
Vero: No voy a ceder a tu chantaje.
Iván: (Sorprendido) ¡¿Qué?!
Vero: Me has oído perfectamente.
Iván: No sabes lo que estás haciendo.
Vero: Lo sé muy bien.
Iván: Entonces tendrás que atenerte a las consecuencias.
Vero: No creo que seas capaz.
Iván: Eso lo comprobarás por ti misma.
Iván cierra la puerta, ante la atónita mirada de la joven.
CON
CASA DE HUGO, ISRA Y ÓSCAR / SALÓN / MAÑANA
Hugo y Óscar hacen el amor apasionadamente sobre el sofá, completamente desnudos. Hugo se inclina y besa a su novio.
Hugo: Te quiero.
Óscar: Y yo a ti.
Vuelven a besarse, y justo en ese momento, Isra aparece por allí.
Isra: ¡Joder!
Hugo: (Asustado) ¡Isra!
Los tres se miran, incómodos.
Isra: Yo… lo siento.
Isra sale rápidamente del salón.
Hugo: ¡Mierda!
Óscar deja escapar una sonora carcajada.
CARCEL DE GIJÓN / CELDA DE CARLOS Y RUBÉN / MAÑANA
Rubén, tumbado en su cama, lee una novela, pero se sobresalta cuando Carlos aparece por allí, visiblemente enfadado.
Carlos: ¡Estoy hasta la polla!
Rubén se incorpora en la cama.
Rubén: ¿Qué ha pasado?
Carlos: Todos aquí son unos hijos de puta.
El joven deja escapar una sonora carcajada.
Rubén: Te recuerdo que estás en una cárcel.
Carlos se sienta en su cama.
Carlos: A mí no me hace gracia.
Rubén: ¿Por qué no me cuentas lo que ha pasado?
El joven coge aire antes de volver a hablar.
Carlos: No me dejan hacer nada.
Rubén: ¿Quiénes?
Carlos: Todos. Me odian. Me están haciendo la vida imposible.
Rubén: Te ven débil.
Carlos: ¿Y eso les da derecho a acosarme?
Rubén: Por supuesto que no. Pero tienes que aprender a imponerte.
Carlos: No es tan fácil.
Rubén: Lo es. Créeme.
Carlos mira al joven, confundido.
Rubén: Tú déjamelo a mí.
El joven mira a Rubén, sin saber qué pensar.
PISO DE JAIME / SALÓN / MAÑANA
Jaime e Iván permanecen sentados en el sofá, tomándose un café cada uno. Hay un incómodo silencio entre ellos.
Jaime: Tengo que reconocer que me ha sorprendido tu visita. Nunca hemos sido muy amigos.
El joven fuerza una sonrisa.
Iván: Sí, lo sé. Pero hay algo importante que tengo que contarte.
Jaime: Tú dirás.
Iván coge aire antes de volver a hablar.
Iván: El hijo que está esperando Vero es mío.
Jaime: (Sorprendido) ¡¿Qué?!
Iván: Lo supimos desde el principio. Yo quería hacerme cargo de ese niño, pero ella tenía otros planes y…
Jaime se levanta, interrumpiéndole.
Jaime: ¿Me habéis estado engañando? ¿Nos habéis estado engañando a todos?
Iván: Jaime, déjame explicarte…
Jaime: (Interrumpiéndole) He escuchado suficiente.
Iván: No lo has hecho, créeme.
El joven coge aire, intentando mantener la calma.
Jaime: Márchate.
Iván: Jaime…
Jaime: (Interrumpiéndole) ¡He dicho que te vayas!
Tras unos segundos en silencio, Iván se levanta, suspirando.
Iván: Vale, como quieras. Pero si alguna vez quieres saber más, ya sabes dónde encontrarme.
Iván sale del apartamento, ante la enfadada mirada del joven.
Jaime: ¡Hijos de puta!
BAR “FOUR” / INTERIOR / TARDE
Suena “Walk Away”, de Christina Aguilera.
Sentado en una de las butacas, Isra se toma un café, pensativo, cuando desde el otro lado de la barra, Lucas se acerca a él, preocupado.
Lucas: ¿Estás bien, Isra?
El pelirrojo fuerza una sonrisa.
Isra: Sí. No te preocupes.
Lucas: Cualquiera lo diría.
Tras unos segundos en silencio, Isra suspira.
Isra: Esta mañana he pillado a Óscar y a Hugo en el salón haciendo… bueno, ya sabes.
Lucas: Ya.
Un incómodo silencio surge entre ellos.
Isra: Obviamente, no me importa que lo hagan. Son pareja, y me alegro de que les vaya bien. Pero si comparten casa con otra persona… al menos podrían hacerlo en su dormitorio, ¿no?
Lucas: Es complicado convivir con una pareja.
Isra: Sí, sí que lo es.
De nuevo silencio.
Lucas: Oye, se me está ocurriendo una cosa.
Isra: (Extrañado) ¿El qué?
Lucas: ¿Por qué no te vienes a vivir conmigo?
Isra: ¿Lo dices en serio?
Lucas: ¿Por qué no? Tú no te sientes cómodo viviendo con ellos, y a mí no me vendría mal tener un compañero para llegar a fin de mes.
Tras unos segundos en silencio, Isra esboza una enorme sonrisa.
Isra: ¿Sabes? Creo que es una buena idea.
Lucas: ¿Cuándo te mudas?
El pelirrojo deja escapar una sonora carcajada.
CARCEL DE GIJÓN / PATIO / TARDE
Un grupo de prisioneros charlan animadamente en el patio cuando Rubén se acerca a ellos, serio.
Rubén: Escuchadme.
Todos se giran, extrañados.
Rubén: Quiero que dejéis a Carlos tranquilo. Es mío. Podéis mataros entre vosotros sin querer, no me la puede sudar más, pero a él dejadle en paz. Si no lo hacéis, ya sabéis a qué ateneros. Así que espero no tener que volver a repetirlo.
Le miran, extrañados.
Rubén: ¿Está claro?
Prisionero: Sí.
Rubén: Bien. Eso espero.
Rubén se aleja de allí, ante la atónita mirada de todos los allí presentes.
APARTAMENTO DE VERO / ENTRADA / TARDE
Vero abre la puerta y se sorprende cuando, al otro lado, se encuentra con un Jaime más enfadado que nunca.
Vero: ¡Jaime!
Jaime: ¿Cómo has podido ser tan hija de puta?
Vero: Iván…
Jaime: Sí. Tu queridísimo Iván.
Vero: Puedo explicártelo.
Jaime: Me habéis estado engañando.
Vero: Jaime, por favor…
Jaime: (Interrumpiéndola) No quiero escuchar nada, Vero.
Vero: ¿No te das cuenta de que te está manipulando? Iván está enamorado de mí, me acosa desde que nos conocemos, y…
Jaime: (Interrumpiéndola) ¡Basta, Vero! ¡Basta de mentiras!
Vero: No son mentiras.
Jaime coge aire, intentando mantener la calma.
Jaime: No quiero que vuelvas a acercarte a mí, Vero. Ni a mí, ni a nadie que me importe.
Vero: No estás siendo justo, Jaime. Al menos, deberías escucharme.
Jaime: Ya he escuchado todo lo que tenía que escuchar. Adiós, Vero.
Jaime se aleja de allí, ante la impotente mirada de la joven.
CASA DE HUGO, ISRA Y ÓSCAR / SALÓN / TARDE
Hugo y Óscar permanecen sentados en el sofá mientras Isra les observa, sentado en el sillón de al lado.
Hugo: Isra, nosotros… queríamos pedirte disculpas por lo que ha pasado esta mañana.
Óscar: Sí. Tendríamos que haber sido más cuidadosos.
El pelirrojo fuerza una sonrisa.
Isra: No os preocupéis. A partir de ahora tendréis la casa para vosotros solos.
Hugo: (Extrañado) ¿Qué quieres decir?
Isra: Me voy a vivir con Lucas.
Óscar: (Sorprendido) ¡¿Qué?!
Isra: Pensadlo. Vosotros sois pareja, necesitáis vivir solos, y yo… bueno, no conozco a Lucas, pero parece un chaval bastante majo.
Óscar: Sí. Sí que lo es.
Un incómodo silencio surge entre los tres, hasta que Hugo se levanta.
Hugo: Te vamos a echar de menos.
Isra también se levanta.
Isra: Y yo a vosotros.
Los dos jóvenes se abrazan, emocionados.
CARCEL DE GIJÓN / CELDA DE CARLOS Y RUBÉN / TARDE
Carlos entra en la celda, en la que Rubén permanece tumbado en la cama. El joven parece impactado.
Carlos: No me lo puedo creer.
Rubén: ¿Qué ha pasado ahora?
Carlos: Me acaban de ceder una máquina en el gimnasio.
Rubén deja escapar una sonora carcajada.
Rubén: Me habías preocupado.
Carlos: Es que me ha sorprendido.
Rubén: Te dije que las cosas cambiarían.
Carlos: (Extrañado) ¿Has tenido tú algo que ver?
Rubén: Tuve una conversación con los chicos, nada más.
Carlos: Ya.
Los dos guardan silencio durante unos segundos.
Carlos: Pues… gracias.
Rubén: Ah, no te preocupes. Estoy seguro de que encontraré la manera de que me lo pagues.
Carlos: (Extrañado) ¿Qué quieres decir?
Rubén vuelve a reírse.
Rubén: Aquí nada es gratis, Carlos.
El joven le mira, sin saber qué decir.
APARTAMENTO DE CLAUDIA / SALÓN / NOCHE
Sentado en el sofá, nervioso, Jaime mira a su alrededor. Claudia no tarda en salir de la cocina, con dos botellines de cerveza entre sus manos. Tiende uno a su ex marido.
Claudia: Aquí tienes.
Jaime: Gracias.
Jaime coge el botellín mientras su ex mujer se sienta a su lado.
Claudia: Pues tú dirás. ¿Qué era eso tan importante que tenías que contarme?
Jaime: Vas a flipar.
Claudia: (Extrañada) ¿Qué pasa?
Jaime: El hijo que está esperando Vero no es mío.
Claudia: (Atónita) ¡¿Qué?!
Jaime: Es de Iván.
Claudia mira al joven, sin poderse creer lo que está escuchando.
Claudia: ¿Iván? ¿El de Marta?
Jaime: El mismo.
Claudia: No puede ser…
Los dos guardan silencio durante unos segundos.
Jaime: ¿No te das cuenta?
Claudia: (Extrañada) ¿De qué?
Jaime: De que ya no hay impedimentos para que podamos estar juntos.
Claudia: No te equivoques, Jaime. Nada ha cambiado.
Jaime: Todo ha cambiado.
Claudia: No.
La joven hace una pausa antes de seguir hablando.
Claudia: Me engañaste, Jaime. Y eso no ha cambiado.
Jaime: Claudia…
Claudia: (Interrumpiéndole) Si eso era todo lo que me tenías que contar, te agradecería que te marcharas. Tengo bastantes cosas que hacer.
Tras unos segundos en silencio, Jaime se levanta.
Jaime: Está bien. Pero voy a luchar por ti, Claudia. Eso tenlo claro.
El joven sale del apartamento, ante la preocupada mirada de Claudia.
APARTAMENTO DE ISRA Y LUCAS / SALÓN / NOCHE
Lucas llena dos copas de champán cuando Isra aparece por allí, visiblemente cansado, aunque con una débil sonrisa dibujada en su rostro.
Isra: Ya está todo en mi habitación. Mañana empezaré a colocar las cosas.
Lucas: Estupendo.
El joven coge las dos copas, y da una a Isra.
Lucas: Brindemos por esta nueva etapa que comenzamos.
Isra: Y por nosotros.
Lucas: Por nosotros.
Los dos jóvenes chocan sus copas y beben, sonrientes.
CONTINUARÁ…